fuga de susurros

Vencida la apatía del domingo, llegué como quien no quiere la cosa, a encontrarme con los susurradores para compartir una intervención que violaba de una sola vez todas las normas del pudor y las buenas costumbres. Una experiencia tan extraña, tan fugaz... y tan cálida!
Por unos instantes dejamos de ser un amontonamiento de existencias absurdas, un instante duró un lazo entre nosotros, una complicidad.


... en un intercambio de poesía por rap!
Y que decir de aquella mirada que me encuentra en fuga,
que ilumina acechante mi escondrijo
que arrastra mi mundo y con él todo de mí